Artículo #25

Una nueva crisis, una nueva oportunidad
El turismo ya sabe de crisis. En cuanto a antecedentes de pandemias, el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) analizó 90 crisis de alto impacto sufridas entre 2001 y 2018, identificando que el tiempo de recuperación se ha reducido en promedio de 28 a 10 meses. En el caso especÃfico de epidemias el tiempo promedio de recuperación ha sido de 19.4 meses. Las experiencias chilenas asociadas a las crisis en turismo, hablan de revitalizar la industria luego de maremotos y terremotos, incendios en parques nacionales o aluviones en plena temporada alta, por cuanto, existe conocimiento o experiencia al respecto. Este knowhow es importante, nos deberÃa permitir ser oportunos en focalizar los esfuerzos para tomar el camino que da respuesta a la incertidumbre y por ende a la salida. Sin embargo, a diferencia de las crisis que ha enfrentado el turismo en nuestra historia, la crisis actual es distinta, puesto no afectó a la infraestructura de los servicios, pero sin duda, modificará la forma en que será requerido entregar los servicios, las forma de relación con los clientes y un desafÃo que requerirá la generación de protocolos confiables y competitivos.
Texto destacado
Es necesario tomar un camino, cuyo diálogo requiere hablar respecto de una revitalización sistémica de la industria, allà el desafÃo.
En el caso especÃfico de epidemias el tiempo promedio de recuperación ha sido de 19.4 meses. Las experiencias chilenas asociadas a las crisis en turismo, hablan de revitalizar la industria luego de maremotos y terremotos, incendios en parques nacionales o aluviones en plena temporada alta, por cuanto, existe conocimiento o experiencia al respecto. Este knowhow es importante, nos deberÃa permitir ser oportunos en focalizar los esfuerzos para tomar el camino que da respuesta a la incertidumbre y por ende a la salida. Sin embargo, a diferencia de las crisis que ha enfrentado el turismo en nuestra historia, la crisis actual es distinta, puesto no afectó a la infraestructura de los servicios, pero sin duda, modificará la forma en que será requerido entregar los servicios, las forma de relación con los clientes y un desafÃo que requerirá la generación de protocolos confiables y competitivos. Dónde estamos, a dónde vamos. Sin duda, a mayo del 2020 ya hemos transitado por un tramo de la crisis, no exento de dolor y de importantes y lamentables consecuencias.
Por lo mismo, hoy, es un ejercicio inútil concentrarse en resolver la duda de ¿Cuándo vuelve a todo a ser cómo antes?, puesto que no volverá a ser como antes y, además, es una pregunta solamente posible de responder a largo plazo. Lo importante, ahora, es comenzar desde ya a imaginar y conjeturar, cómo se re estrena la oferta. Bajo la posibilidad de pensar y plantear escenarios, es viable imaginar que el turismo de naturaleza, dadas sus caracterÃsticas será una primera alternativa para volver a comenzar. Las áreas silvestres protegidas, como espacios abiertos, con infraestructura de servicios, canales de comunicación, supervisión, deberÃan permitir, de forma paulatina, regulada y segura retomar el camino. De igual forma, es esperable que la reflexión del cliente sea “hemos pasado un tiempo de gran estrés, debemos y nos merecemos salir a otros lugares para recomenzarâ€.
El slow travel o el turismo interno deben ofrecer una alternativa para el descanso después o en medio de la convivencia con la pandemia, al parecer debieran ser una posibilidad cierta como estrategia de recuperación. Vamos hacia una nueva forma de gestionar el turismo y es real.
¿Estrategia de precios?
Ya en el mes de marzo, en un vuelo de Emitares entre Dubái y Túnez, los pasajeros fueron sometidos al test Covid, antes de partir de la ciudad emiratÃ.
Debemos en el corto plazo, responder a soluciones tan básicas como: re diseñar el desayuno buffet, donde el total de clientes de un hotel pueden utilizar la misma cuchara para llevar el huevo al pan, o bien, el rubro de tour operadores deberá limitar la cantidad de pasajeros por viaje y el formulario del check-in requerirá de una nueva información, como puede ser la trazabilidad de contagios. Hoy no hablamos únicamente de enfrentar un problema, hablamos de plantear una solución para modificar nuestra oferta, generando nuevos estándares de inocuidad o bioseguridad.
La nueva bioseguridad
Cabe preguntarse, ¿el camino pasa solamente por lanzar una estrategia de precios, o por generar reservas a bajo costo a largo plazo?, es debatible, lo importante, es comprender que debemos dar respuesta a muchas interrogantes de forma oportuna y acertada. La competitividad se redefine. Una primera respuesta de los destinos, algunos hoteles o servicios de turismo, fue enviar un mensaje principalmente enfocado en la emotividad, “volveremos, te esperamosâ€, “Aún seguimos y seguiremos acáâ€. El objetivo de estos mensajes, poco a poco deberá ir cambiando, pasado el tiempo y en función de cómo evolucione la crisis. Los mensajes para ser competitivos en la estrategia de volver a capturar flujo, tendrán mayor impacto al responder a la nueva necesidad de no contagiarse. Será necesario implementar protocolos que aseguren ciertos mÃnimos que persuadan al viajero, ya no tan solo por un certificado estático, se requerirá una comunicación efectiva de acciones, adecuaciones y protocolos que respondan a la nueva necesidad, generar seguridad sanitaria o bioseguridad. Sabemos la importancia del turismo, sabemos que nuestra industria es una de las más afectadas, pero también sabemos que es un rubro que conoce cómo ser punta de lanza en la revitalización económica. Sin embargo, el desafÃo obliga a imaginar, inventar e innovar.
Es necesario tomar un camino, cuyo diálogo requiere de hablar respecto de una revitalización sistémica de la industria, allà el desafÃo. Tanto la base de la oferta (servicios/personas) de turismo, como también la experiencia turÃstica siguen existiendo, esos memorables paisajes seguirán estando, estos buenos vinos y la amabilidad que nos caracteriza, no dejará de existir por un virus. Al igual, que luego de tantas crisis la demanda de turismo volverá, de forma paulatina, pero sin duda volverá, exigiendo nuevos requerimientos y nuevas experiencias. Es necesario reaccionar desde ya.
NOTA: Imágenes gentileza de Arrieros del Maipo.