Artículo #172
Animales domésticos y silvestres: económicos y no económicos
Los animales que hoy consideramos domésticos fueron, hace miles años, originalmente silvestres y el ser humano los fue domando, aclimatando y adaptando a su entorno, sacando provecho de ello. Entre los animales mamÃferos domésticos de importancia económica, que están presentes en todo mundo, podemos destacar a las aves de corral, en conjunto con los equinos, bovinos, caprinos, ovinos y porcinos. En cuanto a los animales domésticos considerados como “no económicosâ€, los principales son los perros y gatos, que tienen por finalidad servir de mascotas, como animales de compañÃa y, asà también, en el caso de algunos perros, para pastoreo, apoyo a personas no videntes y seguridad.
Texto destacado
Los animales domésticos son aquellos que han sido criados y seleccionados por los humanos para vivir en su compañÃa y servirles en diversas tareas. Estos animales han sido domesticados y criados para ser dóciles, obedientes y adaptados a la vida con los humanos.
¿Por qué los llamamos domésticos? Porque conviven cotidianamente con el ser humano, trayendo beneficios a la humanidad, tanto en el plano de la alimentación como en los aspectos de la energÃa, transporte, recreación y algunos tipos de deportes tradicionales. Hay otros animales domésticos, que no se han difundido a nivel mundial, y más bien se encuentran en ciertas regiones especÃficas del mundo. Este es el caso de camellos y dromedarios, yaks, llamas y alpacas, renos, búfalos de agua, gallinetas, gansos y patos, principalmente.
Sin embargo, en la otra mano, este proceso de domesticación y contacto directo y cotidiano con los animales, ha traÃdo una buena parte de las enfermedades infecciosas que nos afectan. Ejemplos como el de las ratas y la peste negra, o el VIH, que se trata del virus de la inmunodeficiencia de los simios, en su origen (VIS), dan cuenta de ello. Asà también ha ocurrido con la encefalopatÃa espongiforme bovina (EEB), más conocida como “enfermedad de las vacas locasâ€, la triquinosis del cerdo, asà como la reciente pandemia del COVID-19 asociada a los murciélagos y pangolines, y la actual gripe aviar, que su nombre lo dice todo.
Domésticos y silvestres
A través de los siglos, la zoonosis -como se conoce a la transmisión de enfermedades de animales a humanos- ha generado epidemias que han causado estragos existenciales, económicos y sociales a extensas comunidades. En efecto, la pandemia de la gripe española de principio del siglo XX (1918-1920), por ejemplo, costó más de cincuenta millones de vidas humanas.
Los animales salvajes, en cambio, son aquellos que viven en su hábitat natural sin la intervención humana y que no han sido domesticados. Estos animales tienen comportamientos naturales que les permiten sobrevivir en su entorno, como buscar alimento, protegerse de los depredadores y reproducirse. La principal diferencia entre los animales salvajes y los animales domésticos, radica en que, los primeros, no han sido criados por los humanos y tienen un comportamiento más instintivo y menos predecible. Los animales domésticos, por su parte, han sido seleccionados y criados para adaptarse a la vida con los humanos y, por lo general, son más predecibles en su comportamiento. Los animales salvajes tienen un papel importante en el ecosistema y contribuyen a mantener el equilibrio natural, mientras que los animales domésticos son criados para satisfacer las necesidades humanas y no tienen un papel importante en el ecosistema.
Cuando un animal silvestre es convertido en mascota, inevitablemente debe pasar su vida en cautiverio, como es el caso de las aves y monos, que son los más comunes. Como, de hecho, ocurre en los zoológicos. Vale la pena preguntarse: ¿Qué sentido tiene a nivel personal o familiar, conservar un animal enjaulado de por vida, con una finalidad casi decorativa?
En Chile, está estrictamente prohÃbo cazar, mantener en cautiverio, y por supuesto, comercializar ejemplares de la fauna silvestre del paÃs. Esta actividad está regulada por el SAG y normada por la Ley de Caza (14.473) y su reglamento, asà como el Convenio CITES -“Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestresâ€-, ratificado por Chile.
Pero, igual como ocurre con las especies domésticas, las especies silvestres también trasmiten enfermedades, como, por ejemplo, la psitacosis, que es una enfermedad infecciosa que suele ser transmitida a los humanos por las aves pertenecientes, principalmente, a la familia de los loros. La enfermedad es causada por una bacteria llamada Chlamydia psittaci. La enfermedad puede ser grave y provocar incluso la muerte, especialmente en personas mayores que no reciban tratamiento. Los monos, por ejemplo, son responsables de la transmisión del ébola y la denominada viruela del mono.
La única ventaja relativa que tenemos, es que, en relación a las enfermedades transmitidas por animales domésticos, contamos con: defensas naturales, personal médico capacitado, tratamientos estándares, medicamentos probados, etc. En cambio, frente a las enfermedades trasmitidas por animales silvestres, foráneos, no tenemos las capacidades instaladas y el tiempo para conseguir lo necesario, para un tratamiento efectivo, lo cual puede ser demasiado tarde para un paciente.
Bienestar animal y tenencia responsable de animales.
El bienestar animal se refiere al estado fÃsico, mental y emocional de un animal y su capacidad para adaptarse y vivir cómodamente en su entorno. El bienestar animal implica la satisfacción de las necesidades fisiológicas y de comportamiento de un animal, cuya domesticación tenga una dimensión económico o no, asà como el tratamiento humano y ético hacia él.
El bienestar animal se puede evaluar en función de diferentes factores, como la alimentación, el alojamiento, la salud, el comportamiento y la interacción social. Un animal que está experimentando un buen bienestar se siente cómodo y seguro en su entorno, tiene acceso a una alimentación adecuada y agua fresca, recibe atención veterinaria cuando es necesario, tiene suficiente espacio y ejercicio y puede expresar sus comportamientos naturales.
Es importante tener en cuenta que el bienestar animal no solo es importante por razones éticas, sino que también tiene implicaciones en la salud humana, la productividad y la economÃa. Por lo tanto, es esencial que los humanos trabajen para garantizar el bienestar de los animales en su cuidado, incluyendo la implementación de leyes y regulaciones adecuadas para protegerlos de cualquier tipo de abuso o maltrato.
Por otra parte, se define como “tenencia responsable de animales†a un conjunto de prácticas y actitudes que tienen como objetivo asegurar el bienestar de los animales que se tienen como mascotas o animales de compañÃa. Esta implica cuidar adecuadamente a los animales, proporcionándoles una alimentación adecuada, agua fresca y limpia, atención veterinaria regular, alojamiento adecuado, ejercicio diario y cariño.
También implica tomar decisiones informadas sobre la adopción de animales, considerando los recursos que se tienen disponibles y el tiempo y atención que se les puede dedicar. Asimismo, implica prevenir el abandono de los animales y proporcionarles un ambiente seguro y libre de peligros. La tenencia responsable incluye la obligación de controlar a los animales para evitar que causen daños a la propiedad, a otros animales o a las personas. Esto puede incluir el uso de correas, cercas u otros métodos para mantener a los animales seguros y bajo control. Esta denominada tenencia responsable de animales es importante por varias razones, entre ellas:
1. Salud pública: Los animales pueden transmitir enfermedades a los humanos si no se manejan adecuadamente. Una tenencia responsable incluye mantener a los animales en buenas condiciones higiénicas y de salud, lo que ayuda a prevenir enfermedades tanto en animales como en humanos.
3. Protección del medio ambiente: Los animales domésticos pueden tener un impacto negativo en el medio ambiente si no se manejan adecuadamente. Por ejemplo, los perros sueltos pueden dañar la fauna local, mientras que los gatos pueden matar aves y otros animales pequeños. Una tenencia responsable implica controlar los animales para minimizar su impacto en el medio ambiente.
4. Prevención del abandono animal: La tenencia responsable también implica tomar decisiones informadas sobre la adopción de animales y asegurarse de que se pueda proporcionar un hogar seguro y adecuado. Al hacerlo, se reduce la posibilidad de abandono de los animales.
La tenencia responsable de animales es importante para asegurar su bienestar, proteger la salud pública, prevenir el impacto ambiental y prevenir el abandono animal. Si eventualmente, no se está cumpliendo con la tenencia responsable de animales, es importante tomar medidas para proteger el bienestar de los animales y garantizar que se cumplan las leyes y regulaciones aplicables.
Algunas opciones que se pueden considerar son reportar el problema a las autoridades competentes, comunicarse con organizaciones de protección animal y, definitivamente, educar a la comunidad sobre cómo cuidar adecuadamente a sus animales de compañÃa.
Cuando no se cumple con la tenencia responsable de animales, es importante tomar medidas para garantizar el bienestar de los animales y asegurarse de que se cumplan las leyes y las regulaciones aplicables. Esto puede incluir reportar el problema a las autoridades competentes, contactar a organizaciones de protección animal, hablar con el dueño del animal o educar a la comunidad sobre la importancia de la tenencia responsable de animales.
...
(*) Sobre el autor:
Tonci Tomic Jakas.
Agrónomo, Economista Agrario PUC. Doctor en Patrimonio Cultural de la U. de Sevilla, España. Académico adjunto de la Facultad de AgronomÃa de la Universidad de Chile. Consultor senior con experiencia en FAO, CEPAL y otros organismos internacionales.